domingo, 2 de febrero de 2014

Reseña El arte de matar dragones de Ignacio del Valle

  • Nº de páginas: 480 págs.
  • Encuadernación: Tapa blanda bolsillo
  • Editoral: ALGAIDA
  • Lengua: CASTELLANO
  • ISBN: 9788498771855
Poco después de finalizar la guerra civil, la Sección de Información de Alto Estado Mayor franquista recibe el encargo de localizar El arte de matar dragones, una tabla italiana perdida en el traslado de los fondos del museo del Prado. La orden procede del propio Serrano Suñer, y Arturo «un agente de pasado turbio y e ndebles convicciones políticas» habrá de investigar el desconcertante periplo de la obra El arte de matar dragones no es sólo una novela de intriga sobre traficantes de arte y ajustes de cuentas en la posguerra. También es la historia de un amor imposible, e incluso un relato iniciático donde la tabla de un pintor italiano anónimo parece ocultar unas claves más allá de la razón y de la historia, y preservar el espíritu de la caballería medieval a través de los siglos, en un país dominado por la crueldad y el odio.

Opiniòn personal
 

Hoy os traigo otra buena obra que tenía muchas ganas de leer y gracias a un sorteo de Algaida he tenido la grata satisfacción de poder disfrutarla.
El libro esta dividido en dos partes con un total de  17 capítulos que a través de 479 paginas vamos a vivir una historia cargada de entretenimiento de una forma muy ligera de leer y altamente aditiva.
Viviremos de primera mano,y muy metidos en la época, un Madrid en pleno 1939, con infinidad de anécdotas que a parte de servir como entretenimiento vamos a conocer muchas cosas de aquella época que tanto nos enriquece a nivel histórico, a pesar de ser una novela de ficcion.
Nuestro protagonista, Arturo Andrade,  es un teniente de la unidad de información del Alto Estado Mayor del ejército franquista, que tiene encomendada la misión de descubrir un robo de un cuadro, que se produjo durante el traslado de las obras del museo del Prado por parte del lado republicano. Esta obra se trata de “El arte de matar dragones”. La orden parte del propio Serrano Suñer, cuñado del mismisimo Franco.
Vicente es otro presonaje que nos acompaña al lado de Arturo. Un limpiabotas y fiel servidor, con sorpresas incluidas y al que salva en una ocasión de ser arrestado por un capitan del  regimen llamado Roman. Cuando esta a punto de llevarse a los dos para interrogarlos ocurre un incidente con un paco que atenta contra un policía. Roman advierte a Arturo que no se olvide de su cara por que se acordara de quien es.
La aparición de Anna, astriaca, en la vida de Arturo, va a darle un toque especial al personaje que llega a sentir obsesión por esta mujer, pero ¿será el amor de su vida?, lo dejo en duda, pero es interesante descubrirlo por vosotros mismos leyendo con la misma intriga que yo lo hice.
Arturo va a vivir unas aventuras impresionantes mientras trata de hilar todo el entramado que gira en la desaparicion de la obra a las ordenes de su comandante Bouthellier. Un día mientras es citado por su superior le presentará a alguien que lo dejará estupefacto y con el que tendrá que colaborar a sus ordenes.
Se entrevistará con diferentes personas para sacar en claro algo de este asunto,.
Frutos es un republicano que iba en el convoy cuando sacaron los cuadros de España, lo tienen recluido en la carcel  y Arturo le hizo una primera visita. Alli lo interroga recriminando los métodos de un brigada encargado de su costodia, mas adelante volverá a visitarlo y encontrará unas cartas que escribia que no llegaron nunca a su destino, pero que el brigada guardó.  Esta vez se encuentra a Frutos en un estado  que no voy a revelar.
Hará una visita al Coronel Gandía, personaje algo molesto para el regimen por que no sabían realmente su posición.
Su amigo el limpiabotas le remite a Publio medina ,un marques , al que podrá localizar en la Casa Margot, un lugar de citas de aquella época.
Merece la pena descubrir el final de este rompecabezas.
La obra merece mucho la pena y creo encontrar en este libro un buen título para pasar momentos inolvidables
Lo recomiendo, no defrauda en absoluto. Me ha recordado en cierta medida a un Don Quijote con su fiel escudero y su propia dulcinea  en el personaje de Anna.
Agradecer a Algaida el envìo del ejemplar

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