- Nº de páginas: 312 págs.
- Editorial: ALGAIDA
- Lengua: CASTELLANO
- Encuadernación: Tapa blanda
- ISBN: 9788490671887
- Año edición: 2015
- Plaza de edición: ESPAÑA
¿Qué ocurre cuando la policía inspira menos confianza que los propios delincuentes? En la convulsa España de principios de los ochenta, los ciudadanos asisten a una oleada de asaltos a joyerías, y la banda del Chuqueli es uno de esos grupos de atracadores que siempre esperan su gran golpe. Pero cuando por fin este se produce, el botín es tan sustancioso que la vida de sus protagonistas ya no vale nada, y son muchos los que reclaman su parte del pillaje. Talco y bronce no sólo es una revisión literaria de algunos de los momentos más siniestros de nuestra historia reciente. Es, sobre todo, una historia de amor y venganza entre el Chuqueli y la Malata, amor y venganza exacerbados, como son todos los sentimientos cuando se vive demasiado deprisa. Con el espíritu de la novela negra clásica y el irreductible estilo de Montero Glez, Talco y bronce es un homenaje al cine quinqui de la época escrito a ritmo de thriller.
Opiniòn personal
El libro que presento hoy es una joya literaria. Es un viaje en el tiempo, un paseo y un regalo que nos hace el autor para conocer aquella España de la década de los ochenta, una historia muy reciente en una joven democracia que acababa de nacer.
El autor nos mete de lleno en aquellos momentos. Ha cuidado todos los detalles para que te sientas un personaje más de la época, sus costumbres, su jerga literaria, los procedimientos policiales, la forma en la que actuaban los delincuentes, joyeros y policías que trataban de llevarse su parte del pastel a cualquier precio.
Este libro incluso hace homenaje al desaparecido Santiago Corella, El Nani, que entro en la Dirección General de Seguridad de la Puerta del Sol de Madrid, pero desapareció sin dejar rastro. Aún hoy en día continua siendo un misterio, pero todo apunta a que fué ajusticiado por unos métodos a base de palos empleados por los policías mas grises que ha tenido este país en toda la historia policial.
El ambiente de esta buena novela negra es genial. Hacía mucho tiempo que no disfrutaba tanto con la lectura de un buen libro. Son poco más de 300 páginas, pero tan amenas que se me ha echo corto.
Un detalle que me ha gustado mucho es que al final del libro tenemos un glosario de términos de la jerga empleada en la época para que podamos consultar su significado en el caso de no entender alguna expresión típìca del momento.
Es una pura novela negra en su esencia, pero también es historia reciente de nuestro país que merece mucho la pena conocer, como una parte fundamental de finales de la transición y el renacer de una democracia que empezaba a dar sus primeros pasos. El cambio del Régimen totalitario que acaba de vivir el país, era dificil para la democracia, quedaban aún muchos residuos del aparato franquista.
La novela esta ambientada en esa España de los años ochenta, cuando la democracia daba sus primeros pasos con una policía aún muy gris y reacia para adaptarse a los nuevos tiempos. La carta Magna comenzaba sus andaduras pero los métodos policiales estaban todavía con protocolos de la época de la dictadura, acogiendo en su seno a unos agentes poco preparados, corruptos y en la gran mayoría de veces con un abuso de poder que seguían siendo muy temidos a ojos de la ciudadanía.
El autor nos sumerge de lleno en aquella España de los delincuentes típicos de aquellas películas que tanto valor nos aportaron como Torete, Vaquilla, Nani, Caso Almería y un largo etc de títulos que eran el reflejo de como se vivía en la época a un lado y a otro de la justicia. Este libro en concreto es un homenaje al cine de aquellos años.
Siempre con el ritmo trepidante de aquellos coches de marca nacional apodados como locas, aquellos 124 y 1430 que tanto gustaban a los delincuentes de aquella década. Eran vehículos que tenían muy buenas prestaciones para la época y muy utilizados por los delincuentes habituales, fáciles de robar y muy útiles para las huídas.
La historia gira en torno a una banda de atracadores, El chuqueli, de origen Vasco, es el cabecilla. Se instala en Madrid y en la casa donde vive conoce a Malata, una chica que acaba de salir de la adolescencia y a sus 18 años tiene un romance con ella, la enseña a conducir y la tiene siempre a la espera a bordo de su flamante 1430 rojo para emprender la huída después de los robos perpetrados.Las joyerías son su principal devoción, pero tienen al acecho a un Policía franquista, Perkins. Pero no solo tendrán que huir de policías, joyeros corruptos también tienen cabida en esta historia.
La novela esta estructurada en varios apartados, comienza con una venganza del Chuqueli y Malata contra unos policías corruptos que les han fastidiado más de la cuenta. La siguiente parte es el comienzo de estos personajes en el mundo de la delincuencia y como surge su particular historia de amor en un Madrid bañado en el inicio de los años 80. Una tercera parte es el desenlace, donde hay mucho amor pero también mucha violencia, con un final que estremece hasta límites insospechados.
El libro me ha parecido una auténtica reliquia que me parece fundamental para conocer ese pedacito de nuestra historia que tanto nos emriquece conocer, pero además del conocimiento que nos aporta nos mete en una historia fabulosa que hace que la lectura sea el placer más impresionante del que poder disfrutar.
Mi más sincera felicitación a este autor que me ha echo disfrutar de la lectura. Hacía mucho tiempo que no disfrutaba tanto con un libro.
Agradecer el envìo del ejemplar a Algaida
El libro que presento hoy es una joya literaria. Es un viaje en el tiempo, un paseo y un regalo que nos hace el autor para conocer aquella España de la década de los ochenta, una historia muy reciente en una joven democracia que acababa de nacer.
El autor nos mete de lleno en aquellos momentos. Ha cuidado todos los detalles para que te sientas un personaje más de la época, sus costumbres, su jerga literaria, los procedimientos policiales, la forma en la que actuaban los delincuentes, joyeros y policías que trataban de llevarse su parte del pastel a cualquier precio.
Este libro incluso hace homenaje al desaparecido Santiago Corella, El Nani, que entro en la Dirección General de Seguridad de la Puerta del Sol de Madrid, pero desapareció sin dejar rastro. Aún hoy en día continua siendo un misterio, pero todo apunta a que fué ajusticiado por unos métodos a base de palos empleados por los policías mas grises que ha tenido este país en toda la historia policial.
El ambiente de esta buena novela negra es genial. Hacía mucho tiempo que no disfrutaba tanto con la lectura de un buen libro. Son poco más de 300 páginas, pero tan amenas que se me ha echo corto.
Un detalle que me ha gustado mucho es que al final del libro tenemos un glosario de términos de la jerga empleada en la época para que podamos consultar su significado en el caso de no entender alguna expresión típìca del momento.
Es una pura novela negra en su esencia, pero también es historia reciente de nuestro país que merece mucho la pena conocer, como una parte fundamental de finales de la transición y el renacer de una democracia que empezaba a dar sus primeros pasos. El cambio del Régimen totalitario que acaba de vivir el país, era dificil para la democracia, quedaban aún muchos residuos del aparato franquista.
La novela esta ambientada en esa España de los años ochenta, cuando la democracia daba sus primeros pasos con una policía aún muy gris y reacia para adaptarse a los nuevos tiempos. La carta Magna comenzaba sus andaduras pero los métodos policiales estaban todavía con protocolos de la época de la dictadura, acogiendo en su seno a unos agentes poco preparados, corruptos y en la gran mayoría de veces con un abuso de poder que seguían siendo muy temidos a ojos de la ciudadanía.
El autor nos sumerge de lleno en aquella España de los delincuentes típicos de aquellas películas que tanto valor nos aportaron como Torete, Vaquilla, Nani, Caso Almería y un largo etc de títulos que eran el reflejo de como se vivía en la época a un lado y a otro de la justicia. Este libro en concreto es un homenaje al cine de aquellos años.
Siempre con el ritmo trepidante de aquellos coches de marca nacional apodados como locas, aquellos 124 y 1430 que tanto gustaban a los delincuentes de aquella década. Eran vehículos que tenían muy buenas prestaciones para la época y muy utilizados por los delincuentes habituales, fáciles de robar y muy útiles para las huídas.
La historia gira en torno a una banda de atracadores, El chuqueli, de origen Vasco, es el cabecilla. Se instala en Madrid y en la casa donde vive conoce a Malata, una chica que acaba de salir de la adolescencia y a sus 18 años tiene un romance con ella, la enseña a conducir y la tiene siempre a la espera a bordo de su flamante 1430 rojo para emprender la huída después de los robos perpetrados.Las joyerías son su principal devoción, pero tienen al acecho a un Policía franquista, Perkins. Pero no solo tendrán que huir de policías, joyeros corruptos también tienen cabida en esta historia.
La novela esta estructurada en varios apartados, comienza con una venganza del Chuqueli y Malata contra unos policías corruptos que les han fastidiado más de la cuenta. La siguiente parte es el comienzo de estos personajes en el mundo de la delincuencia y como surge su particular historia de amor en un Madrid bañado en el inicio de los años 80. Una tercera parte es el desenlace, donde hay mucho amor pero también mucha violencia, con un final que estremece hasta límites insospechados.
El libro me ha parecido una auténtica reliquia que me parece fundamental para conocer ese pedacito de nuestra historia que tanto nos emriquece conocer, pero además del conocimiento que nos aporta nos mete en una historia fabulosa que hace que la lectura sea el placer más impresionante del que poder disfrutar.
Mi más sincera felicitación a este autor que me ha echo disfrutar de la lectura. Hacía mucho tiempo que no disfrutaba tanto con un libro.
Agradecer el envìo del ejemplar a Algaida
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